¿ZUMOS SÍ O ZUMOS NO?
¿Son saludables los zumos industriales? ¿Y los naturales? ¿Puedo sustituir una pieza de fruta por un zumo?. Desde hace tiempo, tenemos la creencia de que un zumo de naranja es lo más sano del mundo pero, ¿qué ocurre cuando nos hacemos un zumo de naranja?
- CONTENIDO DE AZÚCAR. Al exprimir las naranjas, estamos desechando la fibra y la pulpa y lo único con lo que nos quedamos es con el agua, vitaminas y los azúcares libres. Este azúcar va a provocar una gran subida de la glucosa en sangre (hiperglucemia).
Estos azúcares libres se relacionan con mayor probabilidad de diabetes. Un vaso de zumo de naranja puede suponer unos 30g de azúcar para nuestro cuerpo. Además, estos azúcares libres se relacionan con problemas como las caries, sobrepeso y obesidad y enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2.
Si tomásemos la pieza de fruta entera, no tendría lugar esta hiperglucemia ya que estamos consumiendo también la fibra y la pulpa.
2. MENOS SACIEDAD. Al quitarle la fibra, el zumo no sacia lo suficiente y al poco tiempo, volveremos a tener hambre. En cambio, si nos comemos una pieza de naranja, la sensación de plenitud será mayor.
3. MASTICACIÓN. Cuando nos tomamos un zumo, se omite el proceso de la masticación, por lo que la sensación de saciedad es mucho más baja que comiendo una naranja y el consumo de un zumo es mucho más rápido.
4. MÁS CALORÍAS QUE SI CONSUMIMOS UNA NARANJA SOLA. para hacer el zumo, al menos se utilizan 2-3 naranjas, por lo que todas las calorías de esas piezas de fruta las estamos bebiendo como si fuera agua.
Un zumo (los caseros incluidos) nunca sustituye a una fruta ni tampoco equivale a una ración de fruta. Es por todo ello que, desde Centro de Nutrición Pirámide, recomendamos tomar una pieza de fruta antes que un zumo.